Las impresoras modernas son en general estupendas. Una impresora de inyección de tinta puede imprimir cientos de hojas en blanco y negro, a color si es necesario, aunque el costo de estas impresiones termina por recaer en los cartuchos de tinta, los consumibles, el gran negocio en este tipo de dispositivos. Sin embargo, las impresoras solamente pueden imprimir en papel. ¿Qué tal que pudiesen imprimir en otro tipo de materiales, por ejemplo, madera?
Steve Ramsey hizo un tutorial de cómo transferir una impresión de inyección de tinta en madera, de manera muy simple y en menos de dos minutos de explicaciones:
Evidentemente no todas las superficies son útiles para ello y las más porosas son las mejores, por lo que hay que elegir la mejor madera para ello y Ramsey considera un pedazo de madera que sea muy claro. El autor recomienda transferir imágenes con colores muy vivos, los cuales se pierden un poco en la impresión. Hay que ser cuidadosos con la hoja impresa porque la tinta está ahí fresca. No hay que tocar la imagen porque la echaremos a perder. Igualmente, si se quieren imprimir textos o leyendas, hay que hacer que éstas esten al revés, para que salgan correctamente cuando se transfiera la imagen a la madera.
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